Título A Vizsga (La prueba)
Año: 2.011/ 89'/ Hungría
Dirección: Peter Bergendy
Guion: Norbert Köbli
Música: Gergely Parádi
Fotografía: Zsolt Tóth
Reparto: Zsolt Nagy, János Kulka, Péter Scherer, András Balogh, Gabriella Hámori, László Széles, Mihály Szabados, Péter Haás Vander, Áron Dimény, Gábor Hellebrandt.
Mucho mérito tiene este guion que camina con mucho sentido entre la comedia y el drama decantándose en el clímax de la película más por el drama.
La narración tiene mucho que ver con el clásico cazador cazado pero con un tono de humor negro tremendamente inteligente. Sólo si el espectador descubre ese tono, podrá disfrutar de esta trama.
Existe una evidente crítica hacia un sistema policial en el que todos son vigilados por todos, en el que los espías campan a sus anchas manteniendo vigilados a todo el mundo, incluso a ellos mismos.
Lo cómico de la situación parte de que los espías consideran de vital importancia aquello que hacen y que el día de Nochebuena del año 1.957 un grupo de policías secretos se dediquen a controlarse y evaluarse los unos a los otros no deja de tener su ironía.
La red de mentiras, intrigas y el esfuerzo que dedican los personajes para mantener la coherencia y los protocolos de sus trabajos son la clave de lo que la película quiere poner bajo el foco de las luces. Lo innecesario de ese esfuerzo, la locura de ese estado de cosas, la paranoia de vivir bajo ese prisma hace que, simplemente con mostrar una anécdota de ese trabajo, todo parezca ridículo, infantil y exagerado.
La narración casi teatral mantiene la tensión mediante un entremado de situaciones que se teje y se desteje con oficio.
El reparto responde a la perfección a lo que exige el guion, un grupo de actores con mucho sentido y muy bien dirigidos. La banda sonora, aunque no explora sus posibilidades también contribuye a que la película sea muy recomendable.
No he podido encontrar el trailer subtitulado.
Lo mejor: El guion
Lo peor: No haber profundizado más en la parodia.
Recomendable
La narración tiene mucho que ver con el clásico cazador cazado pero con un tono de humor negro tremendamente inteligente. Sólo si el espectador descubre ese tono, podrá disfrutar de esta trama.
Existe una evidente crítica hacia un sistema policial en el que todos son vigilados por todos, en el que los espías campan a sus anchas manteniendo vigilados a todo el mundo, incluso a ellos mismos.
Lo cómico de la situación parte de que los espías consideran de vital importancia aquello que hacen y que el día de Nochebuena del año 1.957 un grupo de policías secretos se dediquen a controlarse y evaluarse los unos a los otros no deja de tener su ironía.
La red de mentiras, intrigas y el esfuerzo que dedican los personajes para mantener la coherencia y los protocolos de sus trabajos son la clave de lo que la película quiere poner bajo el foco de las luces. Lo innecesario de ese esfuerzo, la locura de ese estado de cosas, la paranoia de vivir bajo ese prisma hace que, simplemente con mostrar una anécdota de ese trabajo, todo parezca ridículo, infantil y exagerado.
La narración casi teatral mantiene la tensión mediante un entremado de situaciones que se teje y se desteje con oficio.
El reparto responde a la perfección a lo que exige el guion, un grupo de actores con mucho sentido y muy bien dirigidos. La banda sonora, aunque no explora sus posibilidades también contribuye a que la película sea muy recomendable.
No he podido encontrar el trailer subtitulado.
Lo mejor: El guion
Lo peor: No haber profundizado más en la parodia.
Recomendable