Título: Salt
Año: 2.010/100'/ USA
Dirección: Phillip Noyce
Guión: Kurt Wimmer, Brian Helgeland
Música: James Newton Howard
Fotografía: Robert Elwist
Reparto: Angelina Jolie, Liev Schreiber, Chiwetel Ejiofor, Marion McCorry, Daniel Olbryschki, August Diehl, Daniel Pierce, Hunt Block, Andre Braugher, Olek Krupa, Cassidy Hinkle, Corey Stoll, Vladislav Koulikov, Olya Zueva, Kevin O'Donnell
Está tan fuera de foco Angelina Jolie como en otras interpretaciones en películas de acción que he podido verle. Es curioso el encasillamiento que hace la industria de determinados actores, personalmente, me suena tan raro ver a Angelina Jolie en estos trabajos como ver a Julie Andrews interpretando a una prostituta adicta de puerto barriobajero argentino. Su cara y su cuerpo parecen pedir otros papeles, quizás más cercanos a Changeling (El Intercambio, Eastwood, 2.008) y menos a Salt o a Wanted (Bekmambetov, 2.008), pero cuando los que arriesgan el dinero la incluyen en tantos y tantos repartos de este tipo será porque el personal va al cine a otras cosas que no son propiamente ver cine.
En cuanto a la película he de reconocer que no he podido dejar de comparar este trabajo con el que veía ayer también venido de Hollywood, y como lo de ayer era Unthinkable, de Jordan, 2.010, pues esto me ha parecido muy malo.
En primer lugar porque el guión es tan fácil y tan maniqueo que uno no puede dejar de sentir cierta ternura. Es un recurso tan pobre el que se ha utilizado como llenar el asunto de malos, de manera que cualquier giro de la trama puede estar justificado, todavía estoy pensando por qué no utilizaron al propio presidente como uno más de los que se apuntaban a la macroconspiración.
He buscado allá en lo profundo de mi memoria algún rescoldo de credibilidad al asunto y sólo puedo encontrar ciertas reminiscencias a la utopía platónica de una educación alejada de padres y familia que esculpiría a los futuros ciudadanos de un mundo perfecto, esa idea que no es realmente una utopía porque Platón hizo dos intentos por llevarla a la práctica, es tomada para justificar y arrancar este delirio que sólo busca ensayar un par de escenas de persecuciones todavía no ideadas, pero para eso tampoco son ni muy originales ni muy creíbles.
Demasiado pegadas a las letras de James Bond como para poder levantar el vuelo por sí sola, todavía irrita más en el momento en el que el guión camina por la previsibilidad de que la sociedad de referencia del largo es tan buena que hasta convierte en santos a los monstruos.
Lo único que me ha salvado del aburrimiento ha sido la presencia de un actor al que respeto pero que está dilapidando a marchas forzadas el crédito que le había dado, me refiero a Liv Schreiber.
El departamento de pirotecnia, eso sí, se ha ganado el sueldo.
Lo mejor: Dirección técnica de pirotecnia.
Lo peor: El resto, con el guión a la cabeza.
No recomendable
Estuvimos muy a punto de verla, aunque no precisamente por guión, sino más bien por entretenimiento.
ResponderEliminarAl final nuestra pelota se fue al palo, y escogimos "Killers"... menudo fiasco de película (ni entretiene, ni tiene ritmo, solo tiene, eso sí, error garrafales).
Aunque no sea ninguna joya, no hemos descartado aún Salt... a ver que pasa